El canciller venezolano Nicolás Maduro arribó sorpresivamente a Villavicencio, desde donde se coordina la operación para recibir a los secuestrados de la guerrilla. Los comisionados deciden si continúan o no con la operación. Uribe no garantiza su seguridad
Según dijo a Reuters una fuente gubernamental que fue testigo del arribo, el canciller venezolano Nicolás Maduro llegó en un pequeño avión y en medio de un completo hermetismo y sigilo inició de inmediato una reunión privada con el alto comisionado para la paz de Colombia, Luis Carlos Restrepo.
En este momento se aguardan con mucha expectativa los resultados de esta reunión reservada, ya que Restrepo había dicho poco antes que su Gobierno no estaba en condiciones de garantizar la seguridad de los garantes internacionales del "Operativo Emmanuel", en particular del argentino Néstor Kirchner y del brasileño Marco Aurelio García, según habían dejado trascender las fuentes. Restrepo había admitido esto en una de las varias reuniones que mantuvo durante este domingo con los garantes internacionales.
La novedad dio por tierra con anteriores declaraciones públicas de Restrepo, quien más temprano había afirmado que "de parte del Gobierno colombiano todo está dispuesto y están brindadas las garantías" para llevar adelante la operación.
La nueva situación fue motivo de permanentes conversaciones entre las autoridades civiles y militares de Colombia y Venezuela, y los miembros de las comitivas de los seis países –la Argentina, Bolivia, Brasil, Cuba, Ecuador y Francia- cuyos representantes componen la comisión de garantes.
Las reuniones continuaban pasadas las 19 locales (las 22 en la Argentina), y se esperaba que al término de ellas haya una comunicación oficial que informe si la "Operación Emmanuel" se realizará en los próximos días o si sufrirá una postergación más amplia.
La liberación
Por su parte, el ex ministro venezolano y coordinador de la "Operación Emmanuel", Ramón Rodríguez Chacín, reveló hoy que podrían existir variaciones con respecto a la forma en que las FARC transmitirán las coordenadas indicando el lugar exacto para la liberación de los tres rehenes.
En este sentido, advirtió que las especificaciones sobre el lugar del encuentro pueden no ser otorgadas en forma de coordenadas geográficas, sino que podría tratarse de instrucciones que lleven a un segundo lugar o incluso a un tercero.
"Analizamos todas las posibilidades, como que sea una dirección en un caserío, o en un pueblo donde haya que buscar a una persona que nos de los datos, o que nos indiquen que haya que caminar una distancia desde un helipuerto", explicó Chacín, quien opinó que "son medidas de seguridad entendibles" para la guerrilla.
El coordinador de la operación también confirmó que el equipo que irá a buscar a los tres rehenes -Clara Rojas, su hijo Emmanuel y la ex congresista Consuelo González de Perdomo-, esperará en la ciudad colombiana de Villavicencio los datos del lugar que darán las FARC para la entrega.
Fuente: Télam, NA y Reuters
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