Velatorio privado y sin flores para Cuiña, el ex delfín de Fraga en Galicia

El ex consejero de la Xunta de Galicia y diputado autonómico del PP gallego Xosé Cuiña, fallecido el viernes en Santiago a los 57 años, fue velado ayer, en privado y sin flores, en su casa de Cardexía, en la parroquia de Filgueira, del municipio pontevedrés de Lalín.

Su cadáver fue velado por su familia, que pidió que no se le hicieran llegar flores, y por sus más allegados, que a lo largo de la tarde del viernes y la mañana de ayer se fueron acercando hasta la casa donde vivía el diputado.

El municipio, que el viernes declaró tres días de luto, informó ayer de que mantenía el tradicional concierto de Fin de Año, que se celebró anoche en homenaje al que fue su alcalde durante once años. Hoy se instalará la capilla ardiente en la Casa Consistorial. Podrá ser visitada a partir de las 10.00 hasta las 16.00 horas, en que se celebrará el sepelio.

Cuiña, delfín del ex presidente de la Xunta Manuel Fraga durante largos años, fue alcalde de Lalín de 1979 a 1990, así como presidente de la Diputación de Pontevedra. Ese año Fraga lo nombró consejero de Ordenación del Territorio y Obras Públicas, cargo que ocupó hasta 2003, cuando presentó su renuncia en plena crisis del «Prestige».